Dolor de barriga
Grandes sollozos, muecas de dolor: mi bebé está muy nervioso... Tengo la impresión de que le duele la barriguita, pero no sé qué puedo hacer para aliviar su dolor...
El periodo del destete y la diversificación alimentaria, con sus numerosos (y a veces infructuosos) intentos de introducción de nuevos alimentos, supone un gran cambio en la vida del bebé, un cambio al que su barriguita tiene que adaptarse. He aquí una lista con los pequeños trastornos que pueden causar dolor en la barriga del bebé durante este periodo.
Los cólicos
El bebé llora durante mucho tiempo (a veces durante horas) y está inconsolable. Toda la familia entra en pánico y tú te sientes culpable porque no consigues calmarlo...¡pero no tienes por qué preocuparte tanto!
Si el bebé se alimenta normalmente, si el resto del tiempo te regala sonrisas y si el médico declara que todo está normal, no te preocupes. Relájate, coge al bebé en brazos y acúnalo suavemente. Se sentirá seguro y así, poco a poco, se calmará y aliviarás sus cólicos.
La diarrea
Algunos bebés pueden tener pequeños problemas digestivos. Aunque sea algo frecuente, la diarrea puede ser peligrosa.
La deshidratación puede producirse rápidamente y es importante que controles regularmente el peso de tu bebé. Por lo tanto, no dudes en consultar con tu médico en caso de diarrea.
Importante: con la leche materna, el bebé tiene heces más bien amarillentas y un poco líquidas. Hay que cambiarle el pañal casi inmediatamente después de cada toma, es decir, de 7 a 8 veces al día. Pero no te preocupes, eso no significa que tenga diarrea. En caso de tener la menor duda, consúltalo con tu médico.
El estreñimiento
Si, por el contrario, el bebé tiene estreñimiento, con heces duras o pequeñas, y si llora al empujar, coméntaselo a tu médico.
Importante: por lo general, las heces del bebé suelen ser menos frecuentes y más espesas cuando le das el biberón en lugar del pecho.
Los pequeños reflujos
Los pequeños reflujos son regurgitaciones fisiológicas de leche que afectan a la mayoría de los recién nacidos. Desaparecen de manera espontánea entre el 6º y el 12º mes, cuando el bebé empieza a incorporarse y ponerse de pie. Para favorecer una mejor lactancia materna o una mejor toma del biberón y evitar estos pequeños reflujos, debes poner en práctica algunas reglas sencillas.
Debes evitar:
- La posición sentada, sobre todo en los asientos tipo tumbona
- Un ambiente con humo de cigarrillo
- Los zumos de frutas
- Forzar a tu hijo a que termine un biberón
Debes favorecer:
- Repartir mejor a lo largo del día las tomas de pecho o biberón
- Hacerle que eructe varias veces y evitar acostarlo justo después de la toma
- Eventualmente, elevar un poco el colchón en la parte donde apoya la cabeza
Truco: si no puedes o no quieres dar el pecho, el pediatra puede aconsejarte una leche infantil espesada.
La leche infantil espesada con almidón ayudará a reducir los reflujos fisiológicos de leche.
Estos consejos te ayudarán a a aliviar el dolor de barriga de tu bebé.
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