¿Eres mamá sola? 10 cosas que hacer con tu bebé, que te reportan algo
A pesar de la cantidad de foros sobre crianza en Internet y de tener un bebé en tus brazos, es fácil sentirse aislada y sola siendo mamá. Queda y sal con otros padres a las actividades para bebés, como los grupos de juegos o el yoga con bebés. Te ayudará a sentirte más conectada.
- Sal a pasear: Es una de las cosas que puedes hacer con tu bebé más fáciles y, además, es gratis. Puedes salir en cualquier momento y por cualquier sitio que te apetezca. Sea al parque o al supermercado, te sentirás mucho mejor cuando sientas el viento en tu pelo o una conversación adulta con la cajera. Y, si tienes suerte, el bebé puede dormirse.
- Busca en Internet «áreas de juegos cercanas»: Encuentra un parque con zonas de juegos cerca de casa. Aunque tu bebé sea demasiado pequeño para jugar en los columpios, los parques son un punto de referencia para las nuevas familias y todas están en la misma situación que tú. Hacer un picnic, ver a gente y ojear a posibles nuevos amigos (mamás o papás). ¡Atrévete a decir un «hola»!
- Busca un grupo de madres para ti: Hay muchos grupos de padres y bebés diferentes ahí fuera. Desde los grupos sobre crianza en Facebook hasta las quedadas con carrito de la vida real y los grupos de apoyo de bebés difíciles, en los que sin duda abundan otras mamás solas. La clave está en encontrar tu tribu. Y cuando la hayas encontrado, en lugar de quedarte a un lado, toma la iniciativa y preséntate a otros padres. La expectativa de tener una conversación adulta bidireccional después de tanto lenguaje de bebé puede intimidarte, pero todos tenéis al menos una cosa en común, y quizás mucho más. No lo sabrás hasta que no preguntes.
- Sugiere un día para quedar a jugar o tomar un café: ¿Crees que has conocido a una madre con quien podrías conectar, quizás con un aspecto tan cansado y desaliñado como tú? Mueve ficha e invítala a un café o a que jueguen los bebés. Podría ser exactamente lo que tú y tu homóloga, la otra mamá sola, necesitáis. Imagínate, podréis visitaros la una a la otra, conversar sobre las luces y las sombras de la crianza, sin preocuparte de vestirte o de si has fregado los platos hoy. Quizás ella tenga más ideas de cosas que hacer con tu bebé.
- Ponte al día con el cine: La mayoría de los cines tienen pases para familias por las tardes, mucho más atractivos que las sesiones de las 8 de la tarde que tanto te gustaban antes. Puedes ver los últimos estrenos, echarte una siesta o llorar un poco, junto con tu bebé, en la oscuridad, y nadie sin inmutará.
- Prueba el yoga con bebés: Después de estar encerrada en casa lo que parece que ha sido una eternidad, la oportunidad de estirarte un poco junto con otras mamás, cuyos cuerpos también hayan cambiado después del parto, será una bendición. Nadie te juzgará, ni verás escuetos modelitos de licra y, por supuesto, no tendrás que hacer el pino en tu clase de yoga con bebés. Además, no tendrás que sentirte culpable por tener un «tiempo para ti», puesto que tu bebé tendrá un poco de estímulo y de relajación en una misma sesión.
- Ve al gimnasio: Si más bien eres la reina del cardio y echas de menos tu plan de ejercicios, consulta si tu gimnasio tiene servicio de guardería. Sudar un poco puede hacer maravillas por tu estado de salud mental y físico, aunque solo sea durante media hora. Y tu pequeño estará entretenido con actividades para bebés mientras tú estás ausente.
- Consulta sobre los cuentacuentos en la biblioteca: ¿Estás cansada de leer los mismos cuentos de bebés una y otra vez? Consulta qué actividades para bebés y niños pequeños ofrece tu biblioteca. Tu hijo podrá participar en cuentacuentos y en sesiones musicales e interaccionar con otros niños mientras disfrutan de un rato de juego amable. Quizás hasta tengas oportunidad de leer un rato un libro para ti.
- Visita las galerías de arte: ¿Recuerdas tu vida anterior, cuando sabías algo de arte y otras cosas? Sí, quizás sientas que tu cerebro se ha petrificado, pero es posible que solo necesite un poco de creatividad y cultura para prender la chispa de tu imaginación y tu conciencia de ti misma. Si vas a la galería cuando tu hijo aún es pequeño, colócalo en un portabebés y contempla el arte a placer. Cuando sea un poco mayor, busca galerías orientadas a los niños, con áreas interactivas y actividades para bebés para que él también pueda jugar y aprender.
- Pasa tiempo en familia: Es más que probable que la familia, especialmente los abuelos, salten de alegría si te presentas en su puerta y les pides que cojan al niño mientras tú comes algo, vas al baño o cierras los ojos un segundo. Cuando te digan lo fuerte que eres, no tengas miedo de contarles que estás atravesando un momento difícil o que estás un poco alicaída. La maternidad está repleta de altibajos y ayuda mucho hablar de ello con tus seres queridos. Ellos te darán un abrazo y te dirán que lo estás haciendo muy bien. Porque es verdad. Lee nuestra lista de indicios de tristeza puerperal si te preocupa cómo te sientes.
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